Análisis de “El triángulo de la tristeza”

Escribe: Shanti Benvenuto – CS Paso de los Toros

El triángulo de la tristeza es una película de comedia negra y crítica social del año 2022, escrita y dirigida por Ruben Östlund. Su elenco es integrado por Harris Dickinson (Carl), Charlbi Dean Kriek (Yaya) -recientemente fallecida-, Zlatko Buric (Dimitry), Woody Harrelson (Capitán Thomas Smith), Dolly de Leon (Abigail), entre otros. Esta crítica estará separada en dos partes una sin spoilers -información importante sobre la película- y otra con spoiler.

Sin spoilers

Sinopsis breve: Carl y Yaya son dos modelos suecos que transitan una crisis de pareja. Para solucionar esto deciden embarcarse en un crucero donde las clases sociales y desigualdades son remarcadas en cada momento. 

El film parte de una idea simple; la sociedad del consumo y las apariencias. Ambos modelos luchan por competir ante cuerpos hegemónicos que cada día se acentúan más y se integran de forma forzada a la sociedad. Asimismo, la película ridiculiza la sociedad capitalista y de consumo constante en la que los protagonistas viven.

El apartado musical que acompaña el film en todo momento es muy bueno. Inclusive en escenas dramáticas, la música satiriza y es una aliciente de peso para apoyar la profunda crítica social de la película, en donde los personajes luchan por continuar fingiendo y manteniendo su estatus.

Los maltratos hacia la clase trabajadora son constantes, pero siempre se deja en claro que los agresores son seres vacíos y superficiales. En la situación que los coloca su nivel económico aprovechan para liberar todas sus frustraciones. Tanto es así, que los personajes viven en contradicciones y perjudican sus relaciones por mantener su lugar en la sociedad.

El film tiene tres críticas predominantes; la primera es hacia las clases sociales y económicas. En el crucero conviven asistentes de limpieza, empresarios rusos, influencers, fabricantes de armas, personal encargado del barco, entre otros. La segunda es cómo los contextos favorecen o perjudican a los modos organizativos de la sociedad. Todos los personajes tienen cualidades y apariencias distintas, en cada momento estos modos organizativos cambian para verse modificados por la funcionalidad y cualidades de los protagonistas y por distintas circunstancias se tienen, se elaboran diferentes modos de liderazgo. Finalmente, se critica el debate de qué es justo y qué no. Dos personajes de ideologías contrarias -lo cual satiriza más a los mismos debido al estatus que ocupan- debaten sobre qué es lo justo en una sociedad tan desigual como la actual. La película cuenta con un final agónico donde los protagonistas muestran la faceta más animal y natural de ellos mismos. Todas las críticas tienen un desenlace y conclusión que si bien están sujetos a interpretación, nos interpelan, dejándonos con varias interrogantes sobre la sociedad en la que vivimos.

Una película más que recomendable y muy bien ejecutada por la dirección. Recomiendo verla para leer la parte con spoilers, de esta manera poder entender el desarrollo de los personajes y escenarios donde debido a las circunstancias actúan de distinta manera.

Con spoilers

Carl y Yaya son dos modelos en relación de pareja. Tienen graves discusiones debido a la dinámica conflictiva de la misma.

A lo largo del film se juega con la idea de estatus y posicionamiento social. El primer acto busca dejarnos claro que rol cumplen estos dos personajes en la sociedad. Yaya es una modelo exitosa que debido a sus inseguridades pone a prueba a su pareja para ver si está dispuesto a colaborar económicamente en caso de que decidan tener una familia. Carl tiene un salario menos cuantioso que Yaya. Adicionalmente, el mundo del modelaje los sitúa en un lugar complejo, ya que  si en un momento no se cumplen los requerimientos físicos y cánones de belleza, es posible convertirse en un descarte laboral. 

En simultáneo, Carl tiene problemas de ira y comunicación que aunado a un déficit empático, queda a la sombra de lo que es su pareja.

Ya desde el primer acto, el Director se atreve a criticar a la sociedad del consumo, los cánones de belleza, los roles sociales que se adoptan en pareja, la volatilidad del trabajo en el capitalismo y al mismo tiempo, se dejan entrever algunas críticas a cómo las marcas capitalistas cambian la percepción del consumidor.

El segundo acto y en el que me voy a centrar, comienza con la pareja en un crucero vacacional donde pasarán unas semanas. En la primera escena se ve la presencia de una mosca molestando a Yaya que posa para unas fotos, esta mosca representa lo grotesco del asunto donde una mujer tiene que posar como un objeto de consumo capitalista para poder vivir. La escena continúa y vemos a un trabajador quitarse su camisa debido al calor, al observar Yaya lo saluda y Carl siente celos,  por lo que le hace una escena de celos y se enoja.

Como reacción a lo anterior, Carl va ante la encargada del barco y le comenta sobre la situación vivida con el asistente de mantenimiento. La encargada decide retirarlo del barco y enviarlo de vuelta a tierra. Vemos cómo algunas personas a través de su posicionamiento social, actúan sin importarles el daño que pueden llegar a generar. Un simple capricho basado en el sentido de posesión machista, termina perjudicando a un trabajador.

Esto va en aumento a medida que se nos van presentando personajes como Dimitry, un empresario liberalista que se hizo rico con su empresa de abono. Él y sus allegados viven en una nube de superficialidad al punto de faltar el respeto u obligar a los mozos y asistentes a hacer tareas innecesarias. Esto último es visible en una escena donde obligan a todo el personal del crucero a tirarse por un tobogán de plástico únicamente por capricho. 

Algo que no es ajeno a lo que vivimos cotidianamente, es la naturalidad con la que las clases dominantes en su estatus inamovible utilizan a trabajadores como servidumbre. 

Personajes como Abigail y la Jefa de personal Paula dan una representación certera de algunas contradicciones internas de la clase trabajadora en este crucero. Paula es funcional a los burgueses del barco y se siente parte de ellos al punto de defender sus intereses, Abigail, en cambio, es una asistente de limpieza que solamente cumple con su trabajo limpiando y haciendo servicios de habitación. Relacionado a esto también se nos presentan personajes como Jorma, un millonario del mundo tecnológico que está tratando de  adaptarse a pertenecer a la clase dominante. Podemos ver esto en escenas de la película donde siempre parece desencajar en todo. 

Finalmente, al terminar este segundo acto se nos presenta un personaje que nos entrega muchas líneas a análisis; el capitán del barco, un hombre conflictuado con su nacionalidad estadounidense que presenta varias capas de profundidad siendo un marxista en continua crisis moral. Las escenas en la película en las que aparece están cargadas de cuestionamientos y problemáticas sociales. Todo se desencadena después que el personal se tira del tobogán por orden de Vera -pareja de Dimitry- y el jefe de cocineros advierte que la comida va a verse perjudicada por esto mismo, perdiendo su calidad y pudiendo caer mal a los comensales. Ante esto, la jefa de personal Paula no hace caso a las advertencias y decide escuchar al pedido de Vera.

Tal como advirtió el jefe de cocina, la comida está en pésimo estado y sumado a una súbita tormenta que agita al barco, se nos presenta una de las escenas más grotescas de la película, donde la comida termina generando deterioro en el estado de salud de los cruceristas.

En otra escena, el capitán se enfrasca en una discusión política con el ruso Dimitry. Uno argumenta desde una perspectiva socialista y el otro desde una óptica liberal. Se atacan discursivamente citando a figuras políticas que representan ambos movimientos, creando sátira con que el ruso es capitalista y el norteamericano socialista. En esta discusión aparecen nombres como Thatcher, Reagan y Kennedy en defensa de un modelo capitalista de producción, mientras que del lado del capitán en su defensa hacia el modelo socialista de sociedad utiliza nombres como Edward Abbey y Karl Marx. Las frases dichas por Dimitry atacan al Marxismo considerándolo como un movimiento utópico que no tiene lógica. Por el contrario, el personaje de Harrelson que critica el modelo de producción y sobreexplotación capitalista. 

En la siguiente escena, nos encontramos en la cabina del capitán con ambos personajes en estado de ebriedad. El capitán esboza un discurso que menciona algunos crímenes cometidos por su país: ”Mi gobierno asesinó a Martin Luther King, Malcolm X, Bobby Kennedy y John F. Kennedy. Mi gobierno derrocó a líderes buenos, honestos y democráticos del pueblo en Chile, Venezuela, Argentina, Uruguay, Perú, El Salvador, Nicaragua, Panamá y Bolivia. Junto con el Reino Unido, dividimos el Medio Oriente, creando fronteras geográficas artificiales e instalando dictadores títeres…la guerra en sí misma se convirtió en nuestra industria más lucrativa. Cada bomba que cae, alguien gana un millón de dólares. No tienes que saber dónde explotan esas bombas. No tienes que ver a las madres en duelo y los cuerpos destrozados de sus hijos.”

Para concluir llegamos al tercer acto. La crítica a la sociedad capitalista se centra en las formas de producción de capital y como la industria bélica es autodestructiva. Nuestros protagonistas se terminan viendo relegados a segundo plano ante tantos empresarios millonarios cuyo único interés es seguir ganando dinero con el único fin de alimentar su avaricia y ego. Personajes como el capitán representan esas mentes críticas dispuestas a sacrificar todo lo que creen únicamente por la búsqueda de justicia social, aquella que tanto deseamos todas y todos los socialistas. La película mezcla varias críticas y metáforas que hacen alusiones históricas, en su búsqueda para generar emociones termina volviéndose grotesca por momentos. El guión es un acompañamiento de lujo a escenas que comunican visual e interpretativamente a gran nivel, al punto que cuando un personaje tiene líneas de diálogo son para contextualizar al espectador o hacer una crítica implícita o explícita en sus líneas.

En conclusión, la cinta tiene un espíritu crítico que busca diseccionar la sociedad capitalista desde la sátira y el humor. Asimismo, tiene momentos reflexivos en donde se pueden escuchar frases más que elaboradas que logran poner al espectador en un lugar incómodo donde se ve obligado a repensar su lugar en la sociedad, poniendo sobre la mesa varios debates que si bien han sido dados, es necesario profundizarlos para avanzar y transformar radicalmente esta sociedad tan desigual en la que vivimos.